Articulo (traduccion) que escrive para Esglobal
Cuando el jeque Hamad de Qatar anunció el año pasado que iba a abdicar en favor de su hijo Tamim, muchos confiaron en que el emirato hubiera comprendido que su intervencionismo imperioso era un error y retirase su apoyo a los movimientos islamistas de la región, incluidos los Hermanos Musulmanes de Egipto. Sin embargo, ha pasado casi un año y no se observa ningún cambio. Tamim continúa aplicando la misma política exterior que su padre, una estrategia que pretende ejercer en todo el mundo árabe una influencia independiente de Arabia Saudí y utilizar una red de grupos islamistas en cuyo centro están los Hermanos egipcios….